Saltar al contenido →

Nueva temporada 2013-2014

El blog ha quedado relegado a un absoluto segundo plano. Es complicado mantenerlo y dedicarle tiempo, especialmente hoy en día. Cada vez que conozco a alguien que lo mantiene diaria, semanal o mensualmente, provoca en mi una mezcla de sana envidia y admiración. Lo digo totalmente en serio. Es más complicado de lo que parece.

Personalmente, el concepto de bitácoras —término que suena ya viejuno— me resulta igual de atractivo que odioso. Atractivo porque te ayuda a mantener un archivo de ideas, conceptos y vivencias a lo largo del tiempo que, a posteriori, puedes revisar para analizar objetivamente tus avances personales y profesionales. Odioso porque es un elemento líquido y circunstancial, en el sentido de que una idea escrita aquí hoy puede que mañana no coincida con mi propio pensamiento, lo que me dificulta que me siente a redactar algo. Tengo la manía de buscar ideas transversales, quizás más perdurables.

En cualquier caso, entendiendo que el objetivo no es dejar un legado filosófico sino más bien tener un archivo de lo acontecido y pensado en un momento concreto, reinicio el blog con idea de ir compartiendo, a priori semanalmente, todo aquello que se me pase por la cabeza o que me ocurra en la vida profesional.

Justo ahora hago mi primer año de autónomo. Autónomo en España, que se dice pronto. Es más: autónomo en España tras ser despedido por el cierre de la empresa donde trabajaba, la cual nos dejó con una mano delante y otra detrás, que se dice igual de pronto… Ha sido un año duro, pero me reservo la valoración para el siguiente artículo.

A seguir dándole caña.

Publicado en Sin categoría